La selva es el escenario y personaje omnipresente de estos cuentos. La selva tropical, con su violencia natural incontenible, frente al hombre, aliado a veces, destructor las más, de esa naturaleza salvaje. Y en medio, la fauna: desde la gigantesca serpiente que declara la guerra al hombre, hasta el indefenso cachorro muert o equivocadamente por la mano de su propio amo. Este volumen recoge los ocho Cuentos de la Selva propiamente dichos y una selección de otros siete de idéntica ambientación. Humor y tragedia se combinan eficazmente en ellos, dando como resultado ejemplos antológicos de ese difícil arte que es el cuento, en el que Quiroga se reveló auténtico maestro.