El humor, la ternura y la crítica social se dan cita en este magnífico relato, que se ha convertido eh uno de los libros más leídos en todo el mundo.
La señora Bartolotti vive bastante feliz, aunque la gente la considere rara. Se dedica a tejer alfombras en casa y a comprar por catálogo. Un día recibe por correo una gran lata con un niño dentro y, obligada por las circunstancias, tendrá que cuidar de él. Y lo hará de forma muy original y divertida.