Holmes y Wattson viajan al valle de Sussex, donde un caballero americano que reside en Inglaterra ha sido violentamente asesinado en su mansión, una antigua fortaleza aparentemente inexpugnable. La metodología deductiva, el análisis de criptogramas y otras armas de Holmes en su lucha contra el crimen organizado son descritas con precisión en esta primera parte de la novela. Pero el resultado de la investigación nos trasladará al otro lado del Atlántico, a las minas de Pensilvania y a una sangrienta sociedad secreta... El crimen organizado, el misterio y la acción trepidante configuran una brillante segunda parte en la que Doyle se anticipa a la llamada "novela negra".